Durante algunos periodos de la historia de la humanidad, muchas culturas pensaban que las gemas tenían un origen celestial, de ahí la creencia de que poseían poderes mágicos y que podían “traer la suerte” a los nacidos bajo el signo del zodiaco que les correspondía.
Hoy día se sabe que las rocas y minerales provienen de la naturaleza, pero su composición y propiedades siguen fascinando tanto a científicos como al común de la gente.
De ahí la costumbre de usar la piedra del mes, o bien, la piedra del signo zodiacal bajo el cual se nace.
He aquí algunas sugerencias: